Hawzen

La población de Hawzen es posiblemente una de las mejores bases, junto con Axum, para explorar la región del Tigray, que se caracteriza por paisajes montañosos donde la tradición cristiana ha situado iglesias y monasterios en los rincones más recónditos e inaccesibles que puedan imaginarse.

La región alrededor de Hawzen está repleta de estos lugares, siendo casi siempre necesario caminar para poder acceder a ellos, aunque el esfuerzo siempre es compensado por increíbles vistas del entorno y la oportunidad de descubrir el estilo de vida de los monjes que habitan estos lugares, así como las preciosas pinturas y frescos que se encuentran en el interior de algunas iglesias.

Más allá de este atractivo principal, el pueblo de Hawzen es muy atractivo por sus coloridos mercados y una vida bastante rural y alejada de la occidentalización de las grandes ciudades, siendo además un lugar relativamente poco turístico donde disfrutar tranquilamente de sus rincones sin ser molestado.