Safawi

Si observas el mapa de Jordania, parece que al Noreste haya un rectángulo que alguien ha añadido ahí, como un pegote.

Pues Safawi es la puerta de acceso a este pegote, que a primera vista tan solo contiene desierto atravesado por una carretera que lleva a Baghdad tras unos 500km de carretera. Se trata de este tipo de desierto duro, de tierra, que no tiene dunas ni preciosas formaciones rocosas y, por lo tanto, no goza ni siquiera de una belleza singular.

Sin embargo, esta carretera sigue más o menos en paralelo las múltiples rutas que han seguido las caravanas de la Ruta de la Seda durante milenios, dejando a su paso un rastro de su leyenda. Por desgracia, los materiales de construcción en el desierto aguantan poco el paso del tiempo, con lo que ahora mismo queda muy poco o nada de los vestigios de las poblaciones que los habitaron, aunque tras una travesía en 4x4 hacia el Norte podrás encontrar las de la antigua ciudad de Jawa.

Si te diriges al Este desde Safawi en dirección a la frontera de Iraq descubrirás como va canviando el terreno del desierto, mezclándose ahora sí con roca de color negro y algunas pequeñas montañas. Tras pasar esta región y llegar a Wadi Muqat, girando hacia el Norte por pistas de 4x4 podrás llegar al lago de Burku y las ruinas del fuerte de Burku, que protegía esta reserva de agua. Existe una presa al Norte de lago, que es artificial, hecha ya en el siglo III, y el fuerte tenía la función de defender la reserva para las caravanas que circulaban entre Arabia y Syria. El fuerte es, por lo tanto, de origen romano, aunque fue ocupando durante el período bizantino.

Finalmente, al Sur de Safawi, yendo hacia Al Azraq y desviándose hacia el Sur por una pista de 4x4 se puede llegar tras una media hora a uno de los árboles sagrados más importantes del país, lugar de peregrinaje nacional e internacional, pues se cree que Mohammed descansó bajo este árbol en su camino entre la Meca y Syria.